sábado, 14 de abril de 2012

TECOOKIES

Esta es mi primera incursión en el mundo galletil y, la verdad, me falta todavía mucha práctica, pero poquito a poco lo iré consiguiendo. El tema de decorar con glasa o fondant me parece ahora muyyyyyy lejano, así que he querido estrenarme con unas galletas de mantequilla con forma de bolsita de té como las que he visto en Whole Kitchen, aunque en la red hay más ejemplos. La receta también es de internet, aunque no recuerdo la fuente, ya que la copié en una hoja en plan apunte rápido.

He puesto la cocina de harina hasta arriba, mi gente cuando entraba se echaba las manos a la cabeza, pero al menos están muy bien de sabor y de textura. Como no tenía molde me las he apañado con una escuadra (¡¡¡¿qué!!!) y un cortapizzas, para hacer el agujerito he utilizado una brochetita de las de pinchar chuches y este ha sido el resultado: lo más mono, las etiquetas con las teteras (es que el photoshop lo tengo ya dominado).

Los ingredientes para 40 galletas:

- 150 grs. de mantequilla a temperatura ambiente
- ½ taza de azúcar
- 2 huevo M
- 1 cucharada de esencia de vainilla
- 2,5 tazas de harina fina tamizada
- Leche (un chorrito)

Empecé batiendo la mantequilla, le añadí el azúcar y mezclé bien. Añadí los huevos, uno a uno y la esencia de vainilla. Por último, la harina, primero una taza, integré bien, después otra, integré de nuevo y por último, la media. Le añadí la leche para aligerar un poco la masa, ya que era ella o mis muñecas.

Conseguida la masa consistente, la envolví hecha una bola en film transparente y al frigo un ratito para que se endureciera. A la hora de dar forma a las galletas, saqué la masa del frigo y la extendí sobre la encimera enharinada, con la ayuda de un rodillo, dejándola con un espesor de medio centímetro. Fui cortando galletas y colocándolas sobre la bandeja del horno, con papel de hornear. Las introduje en el horno, precalentado a 180º y las dejé hornear unos 15-20 minutos. Las saqué y las pasé a una bandeja para que terminaran de enfriarse. Una vez frías, fundí chocolate de cobertura en un bol y fui introduciendo una a una hasta la mitad y poniéndolas a secar sobre una rejilla. Una vez compactado el chocolate de nuevo, con mucha, pero que mucha paciencia fui colocándole a cada galleta su hilo con su etiquetilla. Perfectas para tomárselas con un té americano.


1 comentario:

Inmaculada dijo...

¡¡¡ummm...!!! Pero que monas te han quedado, vaya paciencia, agujerito, las etiquetas preciosas... yo me apunto a ese té americano.
La reposteria es muy bonita y se disfruta un montón, pero como tu dices lo malo es despues limpiar, que la mia tambien se pone todita blanca.
Besitos guapisima.